viernes, 27 de abril de 2007

Droga


Cuando escuchaba de los muchos drogadictos que hay en el mundo no le ponía mucha atención y no me parecía mucho pecado ser un traficante de drogas, igual era cuestión de los demás si la consumían o no, pues el hombre tiene la capacidad de escoger entre un camino y otro, así que la culpa no era del que la hacia sino directamente del que la consumía, sin embargo ahora habiendo observado más al mundo y habiendo caído en ciertos vicios "saludables", tengo una mirada más cuidadosa en cuanto a este tema.

Actualmente mi familia cuenta con un drogadicto, una persona que era ejemplo ya que hacia su trabajo y se comportaba muy bien en sociedad, tenia su propio negocio y no habia que sentir de él, ahora no sé porque razón cayó en la droga y va mal, lo cual no deja de ponerme triste, está irreconocible tuvo un accidente de transito y anda en busca de plata para conseguir vicio, ahí es cuando uno se pregunta ¿será qué si es posible salir de un vicio sencillamente con una decisión?, y puesto en su lugar no sé como me comportaría, pero lo que sí sé es que eso de los vicios está quemando, dañando la sociedad y a personas que hacen parte de nuestro mundo personal.

Ahora mi visión del asunto es más comprometida con la vida y responsable con el hombre y con este mundo en que el aletear de una mariposa puede cambiar algo, por lo que he mencionado pienso que los traficantes no son personas que piensan en el mundo para mejorarlo aunque muchos de ellos hayan invertido sus ganancias en sitios pobres de algunos piases, ¿De qué sirve ayudar a que unos mueran y luego ayudar a que otros tengan algo mejor?

Ahora percibo la debilidad humana como propia y concluyó que somos débiles en cuanto a esto de los vicios y se hace necesaria una conciencia más humana en aquellos que tienen en sus manos el poder de condenar a almas débiles como las que mueren a diario por sobre dosis.

Seijuro.

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