Desconexión

Millones de hilos nos unen a todo a la naturaleza, a la vida, a la familia y tal vez hasta a las piedras, pero hoy siento que ya no hay hilos que puedan unirme a tí, y esto empezó cuando la razón gano, cuando fue más importante la lógica, ahora ninguna premisa me lleva a concluir que nos podríamos amar, y sin embargo hay algo aprendido: que te quiero a pesar de que no hayan lazos deteniendo mi caída en el pozo de tu olvido. Tu te quedas en mi corazón o a lo menos lo mejor que me compartiste. Hoy no hay apegos, pero me ha dolido un poco, voy aprendiendo a dejar ir es una asignatura algo complicada, en ocasiones se necesita una vida entera para aprenderla. Todavía no entiendo en que se parece la vida a una mariposa y tal vez no llegue a saberlo, tu voz ya no se escucha y era en ella que se transportaba la respuesta.