lunes, 17 de septiembre de 2012

Nuestros amantes se vuelven parte de nosotros

"Eres la melodia, la danza y el danzarin"
Cita Zen.




¿Recuerdas que te conté que algo de mi se te quedaría y que algo tuyo seria mío después de amarnos, así hoy yo soy un poquito tú y tú por supuesto tienes algo mío, así que uno es responsable de algún modo del camino del otro, acá viene el inventario de haberte conocido:

¿Qué me queda después de tí? Me queda esa locura juvenil que expresabas, la luz de tu sonrisa, tus inseguridades, los deseos de pieles, tu cabello envolviéndonos y mis ganas de hacerte ver el cielo, mis promesas rotas. En mi inventario de parte tuya, soy un poquito niño gracias a tí, también se me pegó un pizca de tu inseguridad, una porción de juventud y esas ganas tuyas por hacer amigos en cualquier rincón del mundo me despertaron mis antiguas ganas de hacerme a un millón de amigos. Me queda el recuerdo de como olías, tanto al natural como cuando los disfrazabas con perfumes.

¿Qué me atrevo a decir que te queda de mí? Pues una visión más abierta del universo, un entendimiento más claro de la vida, el dolor de a veces no comprender para donde vamos, unas ganas intensas de querer y sentir la pasión de manera pura, el deporte y tal vez el amor por la literatura, todo esto tal vez un poco, pero nada es perfecto, también debes tener ahora parte de mis defectos: un orgullo que no te sirve para nada, una vanidad exagerada y el sentido más extraño de la soledad, espero que todo en pocas cantidades, pero las suficientes, para qué, cómo yo, de vez en cuando te acuerdes de mi con un gesto de alegría y agradecimiento de habernos conocido.

Tavo.

No hay comentarios: